- En América Latina existen más de dos millones de mercados de explotación sexual digital; comparten contenido no autorizado, advierte Olimpia Coral Melo
La Ley Olimpia es una aportación legislativa internacional a favor de los derechos de las mujeres, porque reconoce a las víctimas de violencia digital y responsabiliza al “imperio digital” en el delito, afirmó la activista, Olimpia Coral Melo.
Durante el segundo día de trabajos de la Conferencia Mundial de Mujeres Parlamentarias de la UIP, quien fue víctima de violencia digital e impulsora de la ley que lleva su nombre, asentó que este avance legislativo mexicano representa un hito para América Latina y el mundo.
En el panel de discusión “Tolerancia cero a la violencia en línea y fuera de línea contra las mujeres en la política”, Coral Melo refirió que aún existe un rezago importante en la legislación internacional, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas.
Sin embargo, destacó que después de que la reforma fue aprobada en 2018 y avalada en toda la República Mexicana, se han sumado a la legislación países como Argentina, Colombia y Panamá, junto con la que se trabaja en Guatemala y Uruguay, país que anunció que se suma para trabajar en la legislación.
Manifestó que la Ley Olimpia es importante puesto que aún hay camino por recorrer en la lucha contra la violencia digital, la cual afecta también el ámbito del quehacer político, ya que más del 50 por ciento de las mujeres que participan en este rubro, han sido víctimas del delito.
“Somos 90 por ciento las víctimas mujeres de este tipo de violencia y son 87.3 por ciento los agresores hombres, además de que el 73.9 por ciento de las víctimas son estudiantes universitarias”, señaló.
Como sobreviviente de violencia digital, Olimpia relató el proceso que se llevó a cabo en México para legislar en la materia y tipificar el delito como violencia digital, que se refiere a aquellos actos agravados y perpetuados a través de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, que dañan los derechos humanos de las personas, la privacidad la dignidad, la seguridad y la intimidad sexual, entre otros.
Además, mencionó, se hizo un tipo penal y diferentes disposiciones legislativas para castigar la difusión y la producción no consensuada de material íntimo sexual, incluida la que se realiza con inteligencia artificial, así como la incorporación de la educación digital para la creación de agencias especializadas en la investigación de delitos y para no normalizar este tipo de agresión.
Al referirse a la “quema de brujas” en la antigüedad como violencia de género, señaló que hoy las nuevas hogueras se encuentran en las redes sociales como Facebook, Instagram y X, dentro de un algoritmo patriarcal dominado por cuatro hombres principalmente en los países occidentales y América Latina, lo que significa que existe un latente colonialismo y tecnicismos digitales.
Advirtió que en América Latina existen más de dos millones de mercados de explotación sexual digital en donde se comparten y distribuyen fotografías y vídeos sexuales no autorizados.
“En este panel hablamos las víctimas. Presentamos la Ley Olimpia para poder responsabilizar no sólo a nuestros agresores, sino también al imperio digital. Hagamos fuerza juntas”, expresó.
En otro momento de esta mesa, las parlamentarias expresaron que las mujeres que participan en política sufren de violencia a través de Internet, lo que las desalienta a continuar su labor, por ello consideraron importante implementar sanciones para que los perpetradores de violencia en línea tengan consecuencias ante estos actos.
Destacaron que en Tailandia se puso en marcha un plan estratégico para el desarrollo de las mujeres, a fin de eliminar el ciberbullying, combatir las amenazas en Internet, así como para reducir la brecha digital y educar sobre el uso de la tecnología.
Subrayaron que en Brasil se legisló para considerar la violencia política en razón de género como un crimen, porque no es sólo una agresión contra las mujeres, sino a la democracia y el derecho que tienen de participar en la toma de decisiones.
Además, comentaron que en Burkina Fazo se cuenta con una brigada contra la cibercriminalidad y una comisión informática de libertad, pero a pesar de ello, las mujeres enfrentan violencia en línea, como en el caso de la única mujer candidatura a la elección presidencial, quien fue agredida desde el momento que se anunció su postulación y hasta el final de las elecciones.